El plástico es un material omnipresente en nuestra vida diaria, debemos reconocer que fue un elemento que revolucionó las industrias de todos los sectores pasando desde la industria petrolera, farmacéutica, tecnológica, hasta la industria más visible, la industria alimentaria. Sin embargo, el consumo indiscriminado e inconsciente de parte de todos nosotros ha traído enormes impactos nocivos en el medio ambiente y cada vez más en la salud.
Según la Organización de las Naciones Unidas anualmente se producen más de 400 millones de toneladas de plástico en el mundo y sólo un diez por ciento de los desperdicios de esta naturaleza son reciclados. Incluso algunos organismos internacionales como Banco Interamericano de Desarrollo (BID) afirman que se compran un millón de botellas de plástico de un solo uso cada minuto y se usan 5 billones de bolsas de plástico de un solo uso cada año.
En Latinoamérica y el Caribe el 36% de las toneladas de plástico que se producen cada año son plástico de un solo uso, en Argentina se estima que cada persona produce 55kg de plástico por año y todos estos desechos plásticos suelen terminar el mar, pero lo más desolador es que el microplástico en los mares puede ser peligroso para la vida marina, ya que el plástico puede liberar sustancias tóxicas dañando el hábitat marino y reduciendo la biodiversidad.
La producción de plásticos no solo afecta a los mares, sino que para su elaboración se producen emisiones industriales de gases de efecto invernadero, y éstos son uno de los principales impulsores del cambio climático que experimenta nuestro planeta. Por suerte más personas, comunidades, empresas, gobiernos y organismos sin fines de lucro están más comprometidas en buscar una solución, para preservar lo que tenemos para las futuras generaciones.
Actualmente existen miles de programas y campañas, pero déjame contarte uno de los programas impulsados por la ONU, que apunta al compromiso individual, para cumplir el objetivo de emisiones cero para el 2050, se trata de la campaña llamada “Actúa Ahora” que consiste en tomar pequeñas decisiones diarias que tengan efectos menos perjudiciales para el medio ambiente, donde podemos ser parte de la solución e influir en el cambio. El programa consiste en 10 acciones:
Cada una de esas acciones pueden reducir hasta un 20% de nuestra huella de carbono que generamos en nuestro quehacer diario. Si estas acciones te parecieron difícil de hacer o de adaptarlas la ONU realizó una guía por niveles, llamada “Guía de los Vagos para Salvar el Planeta” que te describe pequeñas acciones incluso estando en el sofá de tu casa, todos podemos ser parte del cambio y en OLEPTIKA hacemos nuestra contribución como marca y los invitamos a probar nuestro Envoltorio Ecológico que es una excelente alternativa para reducir la huella de carbono y contribuir a un futuro más sostenible.
